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mataerudelohburrus

Respuestas de foro creadas

Viendo 15 entradas - de la 61 a la 75 (de un total de 90)
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  • en respuesta a: Amamantando con odio #106905

    reconozco que me cuesta expresarme y que tal vez haya quien no me entienda, pero viendo como escribe usted le comprendo perfectamente el lio que se hace. Solo le digo a usted y a todos los que como usted hablan de periodicos basura, cuando no les gusta una noticia, o no le conviene por servilismo, peloteo o simplemente no comprometerse como siempre, que traten ustedes a los demas como le gusta que le traten a ustedes,  no se que edad tendra pero le recordare que cuando los padres de muchos radicales nacionalistas hijos de emigrantes fueron a Cataluña por circustancias de la vida fuero tratados con mas respeto e igualdad de oportunidades, cosa que ahora ustedes permiten que no sea asi.

     

    Me recuerda usted mucho a los franquistas que me mandaban callar cuando me revelaba contra ellos, mucho, tanto como los campamentos. 

    en respuesta a: Amamantando con odio #106901

    pero si es asi como usted dice por supuesto que hay que denunciarlos, ya me gustaría saber donde se esta corrompiendo la convivencia sana y civilizada para denunciarlo, empezando por el presidente del gobierno que tenemos ahora que ha sido un kamikaze de la politica al utilizar la crispación para enfrentarnos en su beneficio particular. No me va a coger usted por ahi ni usted ni ningun charnego ni maketo de los que se tragan todo lo que le echan.

    en respuesta a: Amamantando con odio #106900

    Esa actitud complaciente que muestra usted y muchos como usted que no se sabe y seguramente ni ustedes saben de que parte estan ni a donde van, sois manejados como marionetas para consolidar politicos que os utilizan según sus intereses y nada mas. Gente que argumenta  respeto, a no se quien, y se reprimen de manifestarse como al menos nos quieren hacer creer que son.

    El cantante Alejandro Sanz y el piloto mallorquín Jorge Lorenzo se han enfrentado a través de Twitter, despues que el motorista rechazara ponerse la camiseta de la selección española tras vencer en el circuito de Montmelo. Sanz ha llegado a llamar «cobarde» a Lorenzo, palabras que han provocado la réplica del piloto.

    Diversos seguidores de Lorenzo le propusieron que si ganaba en el circuito de Catalunya se pusiera ‘la Roja’, pero el piloto alegó que «en Cataluña es complicado salir con la camiseta de la selección española. No quiero problemas».

    Alejandro Sanz le ha reprochado estas palabras argumentando que «Xavi y Piqué, por ejemplo, se la ponen. No se. Tú veras». «Lo peor es que cree que va a quedar bien con los catalanes y no va a ser así… Yo respeto a todos los catalanes, los que se sienten españoles y los que no… Pero la cobardía. Eso es una cuestión de actitud», comentó Sanz.

    Estas palabras del cantante han provocado la réplica de Lorenzo, que a través de Twetter le ha escrito: «hola Alejandro, he visto en un Tweet que criticabas lo que comenté sobre la camiseta de la selección. Me gustaría comentar, a ti y a todos los que habéis criticado mis palabras, que me siento mallorquín y español como el que mas, he llevado la bandera de España en mis 2 títulos de 250cc y la ultima vez el pasado mayo en Jerez».

    «Vivo en España y sobretodo me encanta la selección. Así como yo el otro día por respeto a mucha gente dije que no lo celebraría con la camiseta de La Roja, creo que tu tampoco te la pondrías si cantases en el Palau Sant Jordi. Me gustaría que lo comprendieras», ha remarcado el piloto.

    El cantante, en la misma red social, le ha contestado que «yo te invito a que vengas a mi concierto y salgamos con la camiseta juntos. Ya veras como no pasa nada. La gente esta por encima de esos prejuicios… Muchos catalanes están en la selección por encima de sus creencias políticas…todas respetables».

     

    en respuesta a: Amamantando con odio #106892

    Y con todo el cariño y respeto a la buena gente de esas tierras catalanas, pero don haya un brote del germen fascista hay que denunciarlo, no se si usted come ajos por que le han picado o es una madre despreocupada que no sabe donde van sus hijos, ni lo que le enseñan en las escuelas, vivimos adormecidos con drogas sofisticadas y cuando en algun momento volvemos a la realidad no somos nadie. un abrazo.

     

     

    Estamus tontus o que? aqui discutiendu mierdas mientras ellos no siguin afixiandu a multas, impuestus y tasas. Y pa colmu esta mañana oigu que estan piendu en el senau traductores para las lenguas autonomicas, donde se ha visto semejanti camarilla de …………………….. nos estan chupandu la sangri y nusotrus comu jilipollas  riñendu entre nusotrus, disque la broma costaria 1,5 millonis tous los añus,  comu ellus no lo pagan que lo pagin los pringaus de siempri, toa la chusma, venga ya…..

    Estu quierin que llegui el dia que no nos entendamus, menus mal que los que hablamus castellanu siempri nos queara mas salia. 

    No se porque tenemos que estar todo del puto día discutiendo, que si catalan,  maketo,  charnegu, andaluz. El hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra y a lo mejor algunos estan buscando repetir tropiezos pasados. Bueno en realidad si lo se, hoy veía en las noticias otra agresión en el metro de Madrid  por discrepacias politicas, esto es la tension a la que se refería Zapatero cuando el microfono traidor lo descubrió reconociendole a Iñaki Gabilondo que iba a dramatizar para crear tensión porque le beneficia la crispación. Es lo más miserable y mezquino que hemos podido ver en politica, recurrir al enfrentamiento entre nosotros para garantizarse la continuidad en el poder. Es lo más bajo que puede caer un politíco y lo más grave de todo es que la mayoría ha permanecido impasible ante tales declaraciones, cuando eso debería ser motivo de inhabilitación para cargo público.

    en respuesta a: Triste semana #106300

    Sr. Crazy, me parece usted un buen contertulio, aunque en esta última intervención se haya disgustado un poco espero que no haga un drama y no nos abandone. Hasta lo de ahora no hubiera pensado que era usted comunista, dada su inteligencia, con tantos privilegios y derechos, acceso a internet, bien informado, libre de opinar, elegir, circular…. . Creo que usted no ha vivido el comunismo. Yo he conocido mucha gente que ha vivido en países comunistas y no quieren verlo ni en pintura. No se como dice usted que Cuba decide su futuro, el efecto domino se produjo en los países comunistas propiciando la caída del muro de Berlín y el Telón de Acero como confirmación del fracaso del comunismo. Se puede defender los derechos de las personas, la justicia y la libertad sin ponerse etiquetas.

    El Sr. MaGo es una persona sin ideas propias que consciente de ello se limita a descalificar para sentirse agusto consigo mismo, esta clase de gente son los que mantienen lo mismo una dictadura de derecha como una de izquierda.

    Creo que en muchas de estas tertulias discutimos asuntos manidos que no nos aportan nada, por pura complacencia de nuestros egos, terminando enzarzados en lo absurdo.

    Se debe discutir sobre muchos temas que nos afectan directamente, entre otros: las pensiones, los sueldos de los políticos, las pensiones vitalicias de los políticos, quien regula los sueldos de los políticos, el gasto de las administraciones, los sueldos de los alcaldes y quien los regula, los países que albergan terroristas. Los amigos de los presidentes de esos países, etc. etc.

     

     

     

     

     

    en respuesta a: Triste semana #106291

    cuando empezó a destapar los GAL y toda aquella corrupcion del PSOE como ahora el FAISAN. Y lo mejor de todo fue que en venganza, esos periodistas chulitos con alta autoestima y aires de superioridad que creyendose los mejores se rien y burlan de todos los que no piensan como ellos, que presumen de ser defensores de la libertad y la justicia, bajaron a la mierda de las alcantarillas para vengarse de aquel PERIODISTA sacando a relucir en un video su vida intima. En realidad son unos mercenarios sin escrupulos ni principios, gentuza servil y rastrera que en defensa de sus amos reniegan cuantas veces haga falta de la justicia y la razon, veanse el caso de la represión en Cuba o tantos y tantos otros.

    Para ser fieles a la verdad hay que ser chaquetero.

    en respuesta a: La crisis. Mi visión. #106056

    Le entiendo perfectamente y comparto  su exposición, pero insisto, no creo que los responsables sean la gente que nunca ha estado en un aula de economía,  usted mismo lo ha explicado de forma clara, pero si ya en la Universidad donde se suponen mayores cotas de libertad el adoctrinamiento alcanza niveles tan altos, creo que fijarse en el resto de jóvenes sin estudios no tiene sentido.

    Seguro que es un problema de incultura, pero provocada, producto de una ley de educación enfocada al adoctrinamiento con un trasfondo electoralistas.

    en respuesta a: La crisis. Mi visión. #106054

    Tengo que felicitarle por su lucidez de ideas y fluidez para expresarlas y reconocer que para ser usted científico no se le da mal la política, pero discrepo con usted en algunas formas.

    Aunque en grandes rasgos estoy de acuerdo con usted, no entiendo ni comparto sus constantes referencias a que la capacidad de discernir lo que esta bien de lo que esta mal, pase por tener más o menos estudios, ser un ilustrado, haber estudiado economía o ser de la generación más inculta de nuestra historia.

    Me disgusta cundo se pregunta si son muchos los ilustrados como usted y generaliza de incultos a la sociedad española, aunque no tengo estudios superiores y de mis amistades no son muchos los que los tienen, nunca he visto ni oído presumir a ninguno de odiar los libros, todo lo contrario todos quieren saber más y ser más listos conscientes de sus limitaciones.

    No es justo que cargue usted contra los más desfavorecidos en su capacidad intelectual, porque eso dice muy poco a su favor y desluce su brillante intervención.

    Le recuerdo que fue «la flor y nata de la intelectualidad» los que pidieron el voto para ZP y de hecho siguen apoyando al gobierno, incluso algunos tienen programas en emisoras de Radio y TV afines al gobierno y desde donde adoctrinan a la población, ridiculizando y mofandose de todo el que no piensa como ellos.

    Igualmente, es en uno de los ambientes más ilustrados de nuestra sociedad como es la Universidad donde más adeptos gana las doctrinas del gobierno.

    Me incluyo entre los que a duras penas somos capaces de balbucear lo que pensamos desde lo más profundo del abismo, pero no se piense por eso que no tengamos las ideas claras ni que nos vamos a dejar embaucar.

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    en respuesta a: La conciencia del homo sapiens #105992

    Con este mensaje suyo:

    El ser humano apareció libre en el mundo, con las mismas condiciones que cualquier otro ser de la Tierra. Ha sido el hombre a lo largo de la historia quien ha creado la sociedad en la que vivimos, las desigualdades, las muertes, las guerras…a este ser humano es al que hay que agradecerselas. El Señor de los caminos inescrutables del que habla usted nos ha dejado libre a lo largo de la historia y ésto es lo que hemos conseguido nosotros. ¿Por qué si el ser humano ha hecho una mierda, tiene que venir alguien a arreglarlo? Esto se parece un poco al gobierno actual ¿verdad?

    El Señor de los caminos inescrutable  nos hizo libres, pero este gobierno cada vez prohibe más con el pretesto de que perjudican la salud a la vez que permite otras que atentan contra la vida de terceros. 

    Cuando las maquinas dominen la tierra se sabrá. Porque cada vez es mas imaginable un mundo sin trabajadores que sin maquinas.

    en respuesta a: La conciencia del homo sapiens #105996

    afortunadamente hay mucho bueno por conocer, pero pienso que uno de los mas grande es este

    Proverbios y Cantares de Antonio Machado

    I

    Nunca perseguí la gloria

    ni dejar en la memoria

    de los hombres mi canción;

    yo amo los mundos sutiles,

    ingrávidos y gentiles

    como pompas de jabón.

    Me gusta verlos pintarse

    de sol y grana, volar

    bajo el cielo azul, temblar

    súbitamente y quebrarse.

    II

    ¿Para qué llamar caminos

    a los surcos del azar?…

    Todo el que camina anda,

    como Jesús, sobre el mar.

    III

     

    A quien nos justifica nuestra desconfianza

    llamamos enemigo, ladrón de una esperanza.

    Jamás perdona el necio si ve la nuez vacía

    que dio a cascar al diente de la sabiduría.

    IV

    Nuestras horas son minutos

    cuando esperamos saber,

    y siglos cuando sabemos

    lo que se puede aprender.

    V

    Ni vale nada el fruto

    cogido sin sazón…

    Ni aunque te elogie un bruto

    ha de tener razón.

    VI

    De lo que llaman los hombres

    virtud, justicia y bondad,

    una mitad es envidia,

    y la otra, no es caridad.

    VII

    Yo he visto garras fieras en las pulidas manos;

    conozco grajos mélicos y líricos marranos…

    El más truhán se lleva la mano al corazón,

    y el bruto más espeso se carga de razón.

    VIII

    En preguntar lo que sabes

    el tiempo no has de perder..

    Y a preguntas sin respuesta

    ¿quién te podrá responder?

    IX

    El hombre, a quien el hambre de la rapiña acucia,

    de ingénita malicia y natural astucia,

    formó la inteligencia y acaparó la tierra.

    ¡Y aun la verdad proclama! ¡Supremo ardid de guerra!

    X

    La envidia de la virtud

    hizo a Caín criminal.

    ¡Gloria a Caín! Hoy el vicio

    es lo que se envidia más.

    XI

    La mano del piadoso nos quita siempre honor;

    mas nunca ofende al damos su mano el lidiador.

    Virtud es fortaleza, ser bueno es ser valiente;

    escudo, espada y maza llevar bajo la frente

    porque el valor honrado de todas armas viste:

    no sólo para, hiere, y más que aguarda, embiste.

    Que la piqueta arruine, y el látigo flagele;

    la fragua ablande el hierro, la lima pula y gaste,

    y que el buril burile, y que el cincel cincele,

    la espada punce y hienda y el gran martillo aplaste.

     

    XII

    ¡Ojos que a luz se abrieron

    un día para, después,

    ciegos tornar a la tierra,

    hartos de mirar sin ver!

    XIII

    Es el mejor de los buenos

    quien sabe que en esta vida

    todo es cuestión de medida:

    un poco más, algo menos…

    XIV

    Virtud es la alegría que alivia el corazón

    más grave y desarruga el ceño de Catón.

    El bueno es el que guarda, cual venta del camino,

    para el sediento el agua, para el borracho el vino.

    XV

    Cantad conmigo en coro: Saber, nada sabemos,

    de arcano mar vinimos, a ignota mar iremos…

    Y entre los dos misterios está el enigma grave;

    tres arcas cierra una desconocida llave.

    La luz nada ilumina y el sabio nada enseña.

    ¿Qué dice la palabra? ¿Qué el agua de la peña?

    XVI

    El hombre es por natura la bestia paradójica,

    un animal absurdo que necesita lógica.

    Creó de nada un mundo y, su obra terminada,

    «Ya estoy en el secreto -se dijo-, todo es nada.»

    XVII

    El hombre sólo es rico en hipocresía.

    En sus diez mil disfraces para engañar confía;

    y con la doble llave que guarda su mansión

    para la ajena hace ganzúa de ladrón.

    XVIII

    ¡Ah, cuando yo era niño

    soñaba con los héroes de la Ilíada!

    Ayax era más fuerte que Diómedes,

    Héctor, más fuerte que Ayax,

    y Aquiles el más fuerte; porque era

    el más fuerte… ¡Inocencias de la infancia!

    ¡Ah, cuando yo era niño

    soñaba con los héroes de la Ilíada!

    XIX

    El casca-nueces-vacías,

    Colón de cien vanidades,

    vive de supercherías

    que vende como verdades.

    XX

    ¡Teresa, alma de fuego,

    Juan de la Cruz, espíritu de llama

    por aquí hay mucho frío, padres, nuestros

    corazoncitos de Jesús se apagan!

    XXI

    Ayer soñé que veía

    a Dios y que a Dios hablaba;

    y soñé que Dios me oía…

    Después soñé que soñaba.

     

    XXII

    Cosas de hombres y mujeres,

    los amoríos de ayer,

    casi los tengo olvidados,

    si fueron alguna vez.

    XXIII

    No extrañéis, dulces amigos,

    que esté mi frente arrugada;

    yo vivo en paz con los hombres

    y en guerra con mis entrañas.

    XXIV

    De diez cabezas, nueve

    embisten y una piensa.

    Nunca extrañéis que un bruto

    se descuerne luchando por la idea.

    XXV

    Las abejas de las flores

    sacan miel, y melodía

    del amor, los ruiseñores;

    Dante y yo -perdón, señores-,

    trocamos -perdón, Lucía-,

    el amor en Teología.

    XXVI

    Poned sobre los campos

    un carbonero, un sabio y un poeta.

    Veréis cómo el poeta admira y calla,

    el sabio mira y piensa…

    Seguramente, el carbonero busca

    las moras o las setas.

    LlevadIos al teatro

    y sólo el carbonero no bosteza.

    Quien prefiere lo vivo a lo pintado

    es el hombre que piensa, canta o sueña.

    El carbonero tiene

    llena de fantasías la cabeza.

    XXVII

    ¿Dónde está la utilidad

    de nuestras utilidades?

    Volvamos a la verdad:

    vanidad de vanidades.

    XXVIII

    Todo hombre tiene dos

    batallas que pelear:

    en sueños lucha con Dios;

    y despierto, con el mar.

    XXIX

    Caminante, son tus huellas

    el camino, y nada más;

    caminante, no hay camino,

    se hace camino al andar.

    Al andar se hace camino,

    y al volver la vista atrás

    se ve la senda que nunca

    se ha de volver a pisar.

    Caminante, no hay camino,

    sino estelas en la mar.

    XXX

    El que espera desespera,

    dice la voz popular.

    ¡Qué verdad tan verdadera!

    La verdad es lo que es,

    y sigue siendo verdad

    aunque se piense al revés.

    XXXI

    Corazón, ayer sonoro,

    ¿ya no suena

    tu monedilla de oro?

    Tu alcancía,

    antes que el tiempo la rompa,

    ¿se irá quedando vacía?

    Confiemos

    en que no será verdad

    nada de lo que sabemos.

     

    XXXII

    ¡Oh fe del meditabundo!

    ¡Oh fe después del pensar!

    Sólo si viene un corazón al mundo

    rebosa el vaso humano y se hincha el mar.

    XXXIII

    Soñé a Dios como una fragua

    de fuego, que ablanda el hierro,

    como un forjador de espadas,

    como un bruñidor de aceros,

    que iba firmando en las hojas

    de luz: Libertad. -Imperio.

    XXIV

    Yo amo a jesús, que nos dijo

    Cielo y tierra pasarán.

    Cuando cielo y tierra pasen

    mi palabra quedará.

    ¿Cuál fue, jesús, tu palabra?

    ¿Amor? ¿Perdón? ¿Caridad?

    Todas tus palabras fueron

    una palabra: Velad.

    XXXV

    Hay dos modos de conciencia:

    una es luz, y otra, paciencia.

    Una estriba en alumbrar

    un poquito el hondo mar;

    otra, en hacer penitencia

    con caña o red, y esperar

    el pez, como pescador.

    Dime tú. ¿Cuál es mejor?

    ¿Conciencia de visionario

    que mira en el hondo acuario

    peces vivos,

    fugitivos,

    que no se pueden pescar,

    o esa maldita faena

    de ir arrojando a la arena,

    muertos, los peces del mar?

    XXXVI

    Fe empirista. Ni somos ni seremos.

    Todo nuestro vivir es emprestado.

    Nada trajimos; nada llevaremos.

    XXXVII

    ¿Dices que nada se crea?

    No te importe, con el barro

    de la tierra, haz una copa

    para que beba tu hermano.

    XXXVIII

    ¿Dices que nada se crea?

     

    Alfarero, a tus cacharros.

    Haz tu copa y no te importe

    si no puedes hacer barro.

    XXIX

    Dicen que el ave divina

    trocada en pobre gallina,

    por obra de las tijeras

    de aquel sabio profesor

    (fue Kant un esquilador

    de las aves altaneras;

    toda su filosofia,

    un sport de cetrería),

    dicen que quiere saltar

    las tapias del corralón,

    y volar

    otra vez, hacia Platón.

    ¡Hurra! ¡Sea!

    ¡Feliz será quien lo vea!

     

    XL

    Sí, cada uno y todos sobre la tierra iguales:

    el ómnibus que arrastran dos pencos matalones,

    por el camino, a tumbos, hacia las estaciones,

    el ómnibus completo de viajeros banales,

    y en medio un hombre mudo, hipocondríaco, austero,

    a quien se cuentan cosas y a quien se ofrece vino…

    Y allá, cuando se llegue, ¿descenderá un viajero

    no más? ¿O habránse todos quedado en el camino?

    XLI

    Bueno es saber que los vasos

    nos sirven para beber;

    lo malo es que no sabemos

    para qué sirve la sed.

    XLII

    ¿Dices que nada se pierde?

    Si esta copa de cristal

    se me rompe, nunca en ella

    beberé, nunca jamás.

    XLIII

    Dices que nada se pierde,

    y acaso dices verdad;

    pero todo lo perdemos

    y todo nos perderá.

    XLIV

    Todo pasa y todo queda;

    pero lo nuestro es pasar,

    pasar haciendo caminos,

    caminos sobre la mar.

    XLV

    Morir.. ¿Caer como gota

    de mar en el mar inmenso?

    ¿O ser lo que nunca ha sido:

    uno, sin sombra y sin sueño,

    un solitano que avanza

    sin camino y sin espejo?

    XLVI

    Anoche soné que oía

    a Dios, gritándome: ¡Alerta!

    Luego era Dios quien dormía,

    y yo gritaba: ¡Despierta!

    XLVII

    Cuatro cosas tiene el hombre

    que no sirven en la mar:

    ancla, gobernalle y remos,

    y miedo de naufragar.

     

    Mirando mi calavera

    un nuevo Hamlet dirá:

    He aquí un lindo fósil de una

    careta de carnaval.

    XLIX

    Ya noto, al paso que me torno viejo,

    que en el inmenso espejo,

    donde orgulloso me miraba un día,

    era el azogue lo que yo ponía.

    Al espejo del fondo de mi casa

    una mano fatal

    ya rayendo el azogue, y todo pasa

    por él como la luz por el cristal.

    L

    -Nuestro español bosteza.

    ¿Es hambre? ¿Sueño? ¿Hastío?

    Doctor, ¿tendrá el estómago vacío?

    -El vacío es más bien en la cabeza.

    LI

    Luz del alma, luz divina,

    faro, antorcha, estrella, sol…

    Un hombre a tientas camina;

    lleva a la espalda un farol.

    LII

    Discutiendo están dos mozos

    si a la fiesta del lugar

    irán por la carretera

    o campo atraviesa irán.

    Discutiendo y disputando

    empiezan a pelear.

    Ya con las trancas de pino

    furiosos golpes se dan;

    ya se tiran de las barbas,

    que se las quieren pelar.

    Ha pasado un carretero,

    que va cantando un cantar:

    «Romero, para ir a Roma,

    lo que importa es caminar;

    a Roma por todas partes,

    por todas partes se va.»

    LIII

    Ya hay un español que quiere

    vivir y a vivir empieza,

    entre una España que muere

    y otra España que bosteza.

    Españolito que vienes

    al mundo, te guarde Dios.

    Una de las dos Españas

    ha de helarte el corazón.

     

     

     

     

    en respuesta a: La conciencia del homo sapiens #105990

    el cuervo Una vez, al filo de una lúgubre media noche,

    mientras débil y cansado, en tristes reflexiones embebido,

    inclinado sobre un viejo y raro libro de olvidada ciencia,

    cabeceando, casi dormido,

    oyóse de súbito un leve golpe,

    como si suavemente tocaran,

    tocaran a la puerta de mi cuarto.

    “Es —dije musitando— un visitante

    tocando quedo a la puerta de mi cuarto.

    Eso es todo, y nada más.”

     

    ¡Ah! aquel lúcido recuerdo

     

    de un gélido diciembre;

    espectros de brasas moribundas

    reflejadas en el suelo;

    angustia del deseo del nuevo día;

    en vano encareciendo a mis libros

    dieran tregua a mi dolor.

    Dolor por la pérdida de Leonora, la única,

    virgen radiante, Leonora por los ángeles llamada.

    Aquí ya sin nombre, para siempre.

     

    Y el crujir triste, vago, escalofriante

    de la seda de las cortinas rojas

    llenábame de fantásticos terrores

    jamás antes sentidos.  Y ahora aquí, en pie,

    acallando el latido de mi corazón,

    vuelvo a repetir:

    “Es un visitante a la puerta de mi cuarto

    queriendo entrar. Algún visitante

    que a deshora a mi cuarto quiere entrar.

    Eso es todo, y nada más.”

     

    Ahora, mi ánimo cobraba bríos,

    y ya sin titubeos:

    “Señor —dije— o señora, en verdad vuestro perdón

    imploro,

    mas el caso es que, adormilado

    cuando vinisteis a tocar quedamente,

    tan quedo vinisteis a llamar,

    a llamar a la puerta de mi cuarto,

    que apenas pude creer que os oía.”

    Y entonces abrí de par en par la puerta:

    Oscuridad, y nada más.

     

    Escrutando hondo en aquella negrura

    permanecí largo rato, atónito, temeroso,

    dudando, soñando sueños que ningún mortal

    se haya atrevido jamás a soñar.

    Mas en el silencio insondable la quietud callaba,

    y la única palabra ahí proferida

    era el balbuceo de un nombre: “¿Leonora?”

    Lo pronuncié en un susurro, y el eco

    lo devolvió en un murmullo: “¡Leonora!”

    Apenas esto fue, y nada más.

     

    Vuelto a mi cuarto, mi alma toda,

    toda mi alma abrasándose dentro de mí,

    no tardé en oír de nuevo tocar con mayor fuerza.

    “Ciertamente —me dije—, ciertamente

    algo sucede en la reja de mi ventana.

    Dejad, pues, que vea lo que sucede allí,

    y así penetrar pueda en el misterio.

    Dejad que a mi corazón llegue un momento el silencio,

    y así penetrar pueda en el misterio.”

    ¡Es el viento, y nada más!

     

    De un golpe abrí la puerta,

    y con suave batir de alas, entró

    un majestuoso cuervo

    de los santos días idos.

    Sin asomos de reverencia,

    ni un instante quedo;

    y con aires de gran señor o de gran dama

    fue a posarse en el busto de Palas,

    sobre el dintel de mi puerta.

    Posado, inmóvil, y nada más.

     

     

    Entonces, este pájaro de ébano

    cambió mis tristes fantasías en una sonrisa

    con el grave y severo decoro

    del aspecto de que se revestía.

    “Aun con tu cresta cercenada y mocha —le dije—,

    no serás un cobarde,

    hórrido cuervo vetusto y amenazador.

    Evadido de la ribera nocturna.

    ¡Dime cuál es tu nombre en la ribera de la Noche Plutónica!”

    Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

     

    Cuánto me asombró que pájaro tan desgarbado

    pudiera hablar tan claramente;

    aunque poco significaba su respuesta.

    Poco pertinente era. Pues no podemos

    sino concordar en que ningún ser humano

    ha sido antes bendecido con la visión de un pájaro

    posado sobre el dintel de su puerta,

    pájaro o bestia, posado en el busto esculpido

    de Palas en el dintel de su puerta

    con semejante nombre: “Nunca más.”

     

    Mas el Cuervo, posado solitario en el sereno busto.

    las palabras pronunció, como virtiendo

    su alma sólo en esas palabras.

    Nada más dijo entonces;

    no movió ni una pluma.

    Y entonces yo me dije, apenas murmurando:

    “Otros amigos se han ido antes;

    mañana él también me dejará,

    como me abandonaron mis esperanzas.”

    Y entonces dijo el pájaro: “Nunca más.”

     

    Sobrecogido al romper el silencio

    tan idóneas palabras,

    “sin duda —pensé—, sin duda lo que dice

    es todo lo que sabe, su solo repertorio, aprendido

    de un amo infortunado a quien desastre impío

    persiguió, acosó sin dar tregua

    hasta que su cantinela sólo tuvo un sentido,

    hasta que las endechas de su esperanza

    llevaron sólo esa carga melancólica

    de ‘Nunca, nunca más’.”

     

    Mas el Cuervo arrancó todavía

    de mis tristes fantasías una sonrisa;

    acerqué un mullido asiento

    frente al pájaro, el busto y la puerta;

    y entonces, hundiéndome en el terciopelo,

    empecé a enlazar una fantasía con otra,

    pensando en lo que este ominoso pájaro de antaño,

    lo que este torvo, desgarbado, hórrido,

    flaco y ominoso pájaro de antaño

    quería decir granzando: “Nunca más.”

     

    En esto cavilaba, sentado, sin pronunciar palabra,

    frente al ave cuyos ojos, como-tizones encendidos,

    quemaban hasta el fondo de mi pecho.

    Esto y más, sentado, adivinaba,

    con la cabeza reclinada

    en el aterciopelado forro del cojín

    acariciado por la luz de la lámpara;

    en el forro de terciopelo violeta

    acariciado por la luz de la lámpara

    ¡que ella no oprimiría, ¡ay!, nunca más!

     

    Entonces me pareció que el aire

    se tornaba más denso, perfumado

    por invisible incensario mecido por serafines

    cuyas pisadas tintineaban en el piso alfombrado.

    “¡Miserable —dije—, tu Dios te ha concedido,

    por estos ángeles te ha otorgado una tregua,

    tregua de repente de tus recuerdos de Leonora!

    ¡Apura, oh, apura este dulce nepente

    y olvida a tu ausente Leonora!”

    Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

     

    “¡Profeta!” —exclamé—, ¡cosa diabolica!

    ¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio

    enviado por el Tentador, o arrojado

    por la tempestad a este refugio desolado e impávido,

    a esta desértica tierra encantada,

    a este hogar hechizado por el horror!

    Profeta, dime, en verdad te lo imploro,

    ¿hay, dime, hay bálsamo en Galaad?

    ¡Dime, dime, te imploro!”

    Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

     

    “¡Profeta! —exclamé—, ¡cosa diabólica!

    ¡Profeta, sí, seas pájaro o demonio!

     ¡Por ese cielo que se curva sobre nuestras cabezas,

    ese Dios que adoramos tú y yo,

    dile a esta alma abrumada de penas si en el remoto Edén

    tendrá en sus brazos a una santa doncella

    llamada por los ángeles Leonora,

    tendrá en sus brazos a una rara y radiante virgen

    llamada por los ángeles Leonora!”

    Y el cuervo dijo: “Nunca más.”

     

    “¡Sea esa palabra nuestra señal de partida

    pájaro o espíritu maligno! —le grité presuntuoso.

    ¡Vuelve a la tempestad, a la ribera de la Noche Plutónica.

    No dejes pluma negra alguna, prenda de la mentira

    que profirió tu espíritu!

    Deja mi soledad intacta.

    Abandona el busto del dintel de mi puerta.

    Aparta tu pico de mi corazón

    y tu figura del dintel de mi puerta.

    Y el Cuervo dijo: “Nunca más.”

     

    Y el Cuervo nunca emprendió el vuelo.

    Aún sigue posado, aún sigue posado

    en el pálido busto de Palas.

    en el dintel de la puerta de mi cuarto.

    Y sus ojos tienen la apariencia

    de los de un demonio que está soñando.

    Y la luz de la lámpara que sobre él se derrama

    tiende en el suelo su sombra. Y mi alma,

    del fondo de esa sombra que flota sobre el suelo,

    no podrá liberarse. ¡Nunca más!

     

    Edgar Allan Poe (Boston, 1809 – Baltimore, 1849)

    en respuesta a: Mas vocabulariu #105917

    Rahpá.- Sinvergüenza

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