¿Ataques traicioneros?

¿Ataques traicioneros? ¿Conoce usted el significado de dicho adjetivo? Deduzco de su empleo que no, puesto que yo no le debo a usted fidelidad ni lealtad alguna. Faltaría más. Si se refiere al tran trillado anonimato, le contesto con el no menos trillado derecho al anonimato que implica este tipo de foro. Si así se queda más tranquilo le diré que yo tampoco sé quién es usted, ni me interesa lo más mínimo saberlo, y ni tan siquiera sé quién es Kupiu, aunque tengo entendido que es un apodo conocido en el pueblo. Y precisamente el escribir en este tipo de foro implica que otros lectores, no solamente su buen amigo Kupiu, tengan acceso a sus escritos, e incluso tengan derecho a emitir opiniones sobre ellos, aunque estas últimas no siempre sean de su agrado. Las alabanzas aquí vertidas sobre la calidad de sus escritos lo tienen muy mal acostumbrado. ¿Se ofusca usted ante las críticas? ¿ante las ofensas? ¿ante los ataques? La solución es muy sencilla: dirima usted sus diferencias con Kupiu en privado. De lo contrario se expone a la vista y a la opinión de cualquiera de los lectores de la página. Pero claro, no sólo se trataba de «hablar» con su amigo Kupiu, no. Se trataba de seguir intentando adoctrinar al personal, esta vez con la hagiografía de la gran Esperanza Aguirre. Pues aténgase a las consecuencias y guárdese las pataletas para cosas más importantes. Saludos.