Seguimos asistiendo al mayor espectáculo del mundo, la política, un nuevo capítulo de burla y vergüenza.
Con decir federalismo camuflan ante sus votantes la inseguridad que les produce el no tener nuevas ideas que ofrecer, se salen por la tangente y miran hacia otra parte para no quedar mal con nadie, ni con los dictadores que oprimen al pueblo Catalán con la escusa de la identidad nacional.
Una vez más traicionan a los incondicionales que le han dado su voto y que lógicamente cada vez son menos. Ahora cometen el grave error de apoyar el separatismo en las instituciones, con el voto traicionado, a esos opresores del pueblo y entre otras memeces lo justifican diciendo que lo hacen por cortesía, será la misma cortesía que tienen esos dictadores con la gente cuando quieren abrir un negocio y ponerle el nombre en castellano, por ejemplo, entre otras muchas conductas represivas.
Pero lo mas sucio de todo esto es el fin con el que los dirigentes socialistas incurren en su traición, anteponiendo sus ansias de poder al bien general, incluso desoyendo las muchas voces criticas de dentro de su partido, al fin y al cabo «demócratas de pastel». Mientras el tiempo corre y las vidas se marchitan y se pierden oportunidades.